COVID-19: diagnóstico de los Medios de Comunicación

Los medios de comunicación cumplen un papel esencial en la sociedad pero más aun en situaciones de emergencia como la actual ¿Están los medios españoles cumpliendo con su responsabilidad profesional durante la pandemia?

Ilustración editada por mí a partir de la original realizada por Jacobo Pérez-Enciso

Este texto se escribe durante el día 21 de marzo de 2020, podría ser un día como otro cualquiera, pero no, es un día más de cuarentena por la pandemia global que sufrimos a causa del virus COVID-19.

No os preocupéis que ese no es el tema de esta publicación, pero es necesario que lo mencione para que el resto del relato tenga sentido.

Actualmente vivimos en el punto de fuga de varias crisis: la primera y más importante, sanitaria; la segunda y también esencial, social; y la tercera que no está pero estará, económica.

Sanitaria porque un virus hasta ahora desconocido ha entrado ya en más de 20 países  con una proyección de que acabe asolando el mundo entero.

Social porque  a raíz de la catástrofe sanitaria se está poniendo a la sociedad occidental y todas sus infraestructuras físicas y metafóricas a prueba, y no sé si la estamos superando o al menos no sé a qué precio.

Económica porque las actividades productivas de todos los países se van a ver afectadas y/o detenidas, situación con la que nuestro actual sistema económico, el capitalismo, no contaba.

Por supuesto  destacar que la mecha ha sido el problema sanitario, así que es posible que esta situación nos sirva para ser conscientes qué sectores son los realmente importantes en una sociedad.

Pero dentro de toda esta situación hay un actor del que no se ha hablado y que tiene un papel esencial en todas y cada una de estas situaciones, y son los Medios de Comunicación.

En el artículo de Alarma y alarmismo: medios de comunicación y crisis económica’ de Ángel Arrese (Universidad de Navarra) y Alfonso Vara Miguel (Universidad de Navarra) se trata las responsabilidades del periodismo en tiempos económicos convulsos.

¿Por qué son tan importantes los Medios de Comunicación?

Al principio de la carrera hubiera respondido a esta pregunta diciendo que son nuestros ojos para ver el mundo pero ahora diré que actúan como lazarillo que va guiándote en un mundo ciego, en el sentido de que ellos te van avisando de las partes de la realidad que a ellos les parece que te vayan a afectar, lo cual no es la realidad. Y con esta descripción no quiero presentarlos como héroes, al contrario, busco señalar su poder en la sociedad para así poder demandarles un excelente grado de responsabilidad.

Solemos pensar que las agendas funcionan de manera que los medios de comunicación escuchan los temas que forman la esfera pública con el objetivo de trasladar nuestros deseos y demandas a las clases dirigentes. Pero ¿y si fuera al revés? Y si solo son altavoces del poder jerárquico de manera que nos someten a lo que debe importarnos.

Puede parecer paranoico pero pongo un ejemplo: que un político ponga en bandeja un titular falso o no lo suficientemente grande e importante como para que los medios, por lo menos, deban dedicar cierto tiempo a comprobar su veracidad; mientras y hasta que se destapa la verdad, han vaciado cuentas de paraísos fiscales para evitar que la investigación por corrupción les llegase a salpicar.

En este ejemplo los medios son utilizados de forma premeditada y es posible que se dé el caso de que al final sean una víctima más pero no podemos pecar de confianza y ser conscientes de que el poder siempre hace pactos con el poder para protegerse mutuamente.

¿Cuál es la responsabilidad de los medios durante una crisis?

Lo que yo respondería, basándome en mis estudios de Periodismo es que, su labor es ser la voz que consigue alzarse y ser escuchada en medio del huracán, acallar y detener la máquina del fango, ser la madre que te escucha y te dice lo que necesitas saber y no lo que quieres oír, ofrecer datos verificados, desmentir bulos, mantener y crear calma; hacer un buen periodismo.

Kapucinski en su libro ‘los cinco sentidos del periodista’ decía que “para escribir una hoja había que haber leído cien”, y que “una mala persona no puede ser buen periodista”. Así que en definitiva lo que se debe buscar en esta profesión es el equilibrio del sentimiento razonado.

Encontrar un ejemplo de esas buenas y malas prácticas lo tenemos muy fácil dado la avorágine informativa de estos meses sobre el COVID-19.

Ejemplos de buenas y malas praxis

En el caso de mal ejemplo tenemos al periódico ABC y su noticia sobre que “muere un perro después de que su dueña terminase la cuarentena por coronavirus”. ¿Por qué decimos que está mal? Porque cuando entras en la noticia lees que el perro tenía la edad de 17 años que en cifras humanas sería como tener 93 años, esto quiere decir que su organismo estaría muy debilitado y las causa del fallecimiento puede haber sido simplemente la edad, ya que no está constatado oficialmente como que la causa de la muerte fuera el agente patógeno en cuestión; de ahí que la propia noticia comience con un  “podría tratarse del primer perro que muere en el mundo con coronavirus”, es decir, suponiendo y no afirmando.

Los noticias que se basan en suposiciones no son noticias, son rumores que lo único que consiguen es el aumento de  la histeria social en cuanto a la idea de que las mascotas pueden ser foco de propagación del virus, lo que se transforma en que durante este tiempo se hayan multiplicado los abandonos de animales, cuando la OMS  asegura que “no hay pruebas” de que sea cierta esa posibilidad.

Por otro lado, una muestra de profesionalidad en el periodismo viene dado desde Newtral y  su publicación enfocada a desmentir bulos que han circulado por las redes sociales durante estos días. Detener la propagación de noticias falsas es una de las labores más importantes de un periodista en tiempo de guerra informativa donde los ciudadanos son más expuestos a ser engañados y manipulados.

¡No te puedes ir sin apuntar estos consejos que te doy para no ser dañado por noticias falsas!

También podéis descargar el vídeo como presentación de power point.


Bibliografía

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